Entre ignorantes y faltos de idoneidad
 
                Miguel Angel Sandoval
El TSE debe dar un giro, aún tiene tiempo”.
La última perla del TSE fue el fin de semana último, la inscripción del ciudadano Manuel Baldizón a una candidatura de diputado. Aquí el tema es el de idoneidad que está en entredicho. Como se sabe, Baldizón es exconvicto en EEUU y Viene al país, expulsado o deportado de EEUU. No vino blasonando inocencia. Aparte, tiene en el país varios procesos pendientes. No me interesa saber si es culpable o inocente. Pero mientras se establece que es, no debió ser inscrito.
La otra cara de la moneda es la que corresponde a la candidatura de uno de los Arzú. No sé si es un perseguido por la ley, o si no tiene finiquito, o si puso un par de pancartas de manera anticipada. Lo que, si me parece que todo mundo sabe, es que no ha sido juzgado y condenado en tribunales de los EEUU, ni fue deportado, y que no tiene procesos penales abiertos en el país. A todas luces hay aquí una inconsistencia. Dos pesos y dos medidas. ¿Qué dice el TSE al respecto?
El otro gran tema es el del MLP y su binomio Telma Cabrera/Jordán Rodas. Si es por un finiquito que Jordán Rodas afirma tener y que el TSE dice que no tiene, pues se plantea un tema grave. Escuché en un programa de radio la versión de un magistrado sobre el particular. En verdad no se mantiene en pie. Dio escusas y solo excusas. Nada consistente. En este caso parecería que un finiquito, que por lo demás no se encuentra planteado en la constitución política, es el gran pretexto para dejar fuera un binomio con esas características. Grave.
Hay en esto dos temas clave. Uno es que la idoneidad no puede ser certificada por magistrados incompetentes. Escuche en radio por lo menos a uno de ellos: es un señor Aguilera, perdón si lo cito, pero sus declaraciones son públicas y, en consecuencia, los comentarios son igualmente públicos. No se hace ninguna acusación infundada y no se citan platicas privadas. Por lo demás, en toda democracia, los propósitos de cualquier magistrado son debatibles.
Los planteamientos de Telma Cabrera y Jordán Rodas sobre la necesidad de una Asamblea Constituyente Plurinacional con pueblos originarios debe ser debatida y las urnas son una manera de medir si es procedente o no. Estamos en un momento que puede ser adecuado para discutir esas reformas. Quizás no, pero no se puede impedir que se haga un planteamiento de esa naturaleza por leguleyadas.
Hay también los planteamientos de Roberto Arzú. Señalar que hay crisis del sistema, bien podría ser algo que las urnas decidieran. Igual con los precios absurdos de las medicinas, o de la energía eléctrica. Son temas que no aparecen en la mayoría de candidatos. El punto es que dos planillas excluidas plantean temas de fondo, no leguleyadas ni ocurrencias.
Y valdría la pena preguntar por el combo de las canastas navideñas, que son inscritos sin contar, a todas luces, con la idoneidad requerida. O la hija del genocida con clara prohibición constitucional o la de un pastor con igual limitación. Y luego las candidatas plásticas deliciosamente ignorantes y los narco-candidatos. ¿Hacen falta más ejemplos para dudar de la idoneidad del máximo tribunal electoral?
 

 
                     
                       
                       
                       
                      