El concepto de ciudad esponja

Omar Marroquín Pacheco
«ciudad esponja» es un concepto de planificación urbana que busca que las ciudades funcionen como una esponja, absorbiendo y reteniendo el agua de lluvia para luego utilizarla, limpiarla y liberarla de forma controlada.
El objetivo principal es gestionar el agua de manera más sostenible y resiliente, mitigando los problemas de inundaciones, sequías y escasez de agua, además de mejorar la calidad del
agua y el medio ambiente urbano.
Características clave del concepto de ciudad esponja:
● Infraestructura verde: Se prioriza la integración de elementos naturales y seminaturales
en el entorno urbano, como parques, jardines de lluvia, techos verdes, humedales
artificiales, pavimentos permeables y franjas de vegetación. Estos elementos ayudan a
absorber el agua de lluvia, reducir la escorrentía superficial y permitir la infiltración en el
suelo.
● Sistemas de drenaje urbano sostenible (SUDS): Se implementan técnicas y
estructuras que imitan los procesos naturales de gestión del agua, como la bioretención,
los estanques de infiltración, las zanjas de infiltración y los tanques de tormenta. Estos
sistemas almacenan temporalmente el agua de lluvia, permitiendo su infiltración gradual
en el subsuelo o su reutilización.
● Permeabilidad: Se fomenta el uso de materiales permeables en pavimentos, aceras y
estacionamientos para permitir que el agua se filtre al suelo en lugar de escurrirse
rápidamente.
● Almacenamiento y reutilización: Se implementan sistemas para capturar y almacenar
el agua de lluvia para su uso posterior en riego, limpieza urbana, recarga de acuíferos o
incluso para usos no potables en edificios.
● Soluciones basadas en la naturaleza (SbN): El enfoque general se basa en trabajar
con los procesos naturales en lugar de depender únicamente de infraestructuras grises
(tuberías, alcantarillas, etc.) para la gestión del agua.
● Multifuncionalidad: Muchos de los elementos de la ciudad esponja, como parques y
jardines de lluvia, cumplen múltiples funciones al proporcionar espacios verdes para el
recreo, mejorar la biodiversidad y contribuir a la regulación térmica urbana.
El concepto de ciudad esponja surgió en China y se ha adoptado en diversas ciudades
alrededor del mundo como una estrategia para hacer frente a los desafíos del cambio climático y la urbanización, promoviendo ciudades más resilientes, sostenibles y habitables.